
NUESTRA HISTORIA
La historia de El Lago comienza en 2000, cuando se creó en este idílico espacio el restaurante del Club House de Greenlife Golf, un lugar que con el paso del tiempo se ha convertido en actual referente de la alta cocina andaluza y malagueña, que ha sido capaz de mantener durante más de 17 años la estrella Michelin otorgada en 2005.
Reconocido con una estrella Michelin y con Fernando Villasclaras al frente de su cocina, es una de las piezas fundamentales del desarrollo de la alta gastronomía en Málaga en los últimos veinte años y, consecuentemente, del resto de Andalucía.
Ubicado en Greenlife Golf, en el corazón de Elviria Hills, El Lago ofrece una experiencia culinaria auténtica, íntima y de temporada, en el que el principal objetivo es establecer un estrecho vínculo con un gran equipo formado por productores de su entorno.
Por el día se transforma en Midi, una propuesta gastronómica que surgió en 2020 para ofrecer al público local una opción más casual sin perder la esencia del restaurante. Así, Midi traslada al cliente, al igual que Lago, una actitud consciente a través de su propuesta informal y creativa dentro del mismo espacio.


TERRITORIO Y GASTRONOMÍA
Unos de los pilares de la cuidada oferta gastronómica es la búsqueda la sostenibilidad y de los mejores productos de la tierra, a los que aplicando las técnicas de elaboración más adecuada los convierten en deliciosos bocados con texturas y sabores muy diferentes consiguiendo con ellos transmitir lo mejor de sus raíces. Así, el menú Sazón que ofrece El Lago se basa en la creatividad del equipo de cocina con el KM0 como inspiración.
Midi traslada al cliente, al igual que Lago, una actitud consciente a través de su propuesta informal y creativa dentro del mismo espacio.
CHEF
FERNANDO VILLASCLARAS
Nacido en Nerja (Málaga), criado entre aromas a guisos con todo el sabor propio de sus abuelas, una pasión por los fogones que amplió posteriormente de forma reglada en la Escuela de Hostelería de Benahavís. Conforma su camino profesional en restaurantes dirigidos por cocineros donde la materia prima es la base de todo fundamento culinario.
De ahí su paso por Sollum en Nerja, con Juan Quintanilla como primer maestro o 1870 con Aitor Perurena. Su visión y actitud se amplía y refuerza tras su estancia en Mugaritz, y de ahí vuelta a la Costa del Sol.
Fernando con su actitud, inquietud y conocimiento muestra el ADN de El Lago en cada una de sus elaboraciones: la verdad y el sabor de nuestro territorio y sus materias primas.
